Birdwatching in Gijón (N Spain)

lunes, 18 de abril de 2022

Gavión hipérboreo "Larus hyperboreus". Una comparativa entre edades.

   Abril suele ser un mes bueno para el avistamiento de las que llamamos "gaviotas blancas". Los inmaduros de gaviota groenlandesa Larus glaucoides y gavión hiperbóreo Larus hyperboreus. Si alguno de los que lee esta entrada ha consultado alguna vez una guía de aves (una práctica básica, para los que nos dedicamos a la observación de aves, es la consulta de una guía de campo de aves) habrá visto que los ejemplares de edad a partir de un primer invierno avanzado y de un segundo invierno, en ambas especies, tienen un color general predominantemente blanco. Vistos en un bando de gaviotas son como un enorme copo de nieve. Algo similar pasa con los individuos juveniles y de primer invierno poco avanzados en su muda. No son blancos. Pero su color general es de un beis muy claro. Un color arena que, así a bote pronto, parece como el que tiene el llamado "café manchado", "leche manchada". Un café muy bajo de café. Casi solamente leche. Ambos plumajes destacan, en medio de un bando de gaviotas, como un brillante faro en una noche oscura. Dicho así coloquialmente y grosso modo, resulta bastante visual. Pero poco riguroso. Así que, aprovechando que estos días pasados ha llegado al puerto de El Musel un gavión hiperbóreo de primer invierno, os ofrecemos una entrada comparativa de plumajes de gaviones hiperbóreos jóvenes. Con aves de primer invierno, segundo invierno y juveniles. En ella os mostraremos los diferentes plumajes que presentan en esas edades. Y haremos hincapié en las pequeñas, pero significativas diferencias, que hacen que podamos separar las edades de unos ejemplares aparentemente muy semejantes entre sí. Antes de meternos en harina, vamos a presentaros al protagonista y hacer un poco de historia. El de la foto es el primer gavión hiperbóreo que pudimos fotografiar. Es una foto de 'digiscoping' y cámara compacta que, debido a la cercanía del ave, está ligeramente viñeteada. Fecha y hora van impresas.

Gavión hiperbóreo Larus hyperboreus de 2º invierno.

   Y haciendo historia sobre la presencia de la especie en nuestro concejo, deciros que desde que se recopilan registros en los anuarios ornitológicos asturianos, desde el año 1993 y hasta el mes de diciembre del 2020, se han documentado un total de treinta y siete (37) ejemplares en Gijón. La mayoría, como no puede ser de otro modo, se han visto en el puerto de El Musel. Fuentes: Anuario Ornitológico de Asturias, revista El Draque y Annuariu Ornitolóxicu d'Asturies. Ambos de la Coordinadora Ornitolóxica d'Asturies (C.O.A.):



   El estatus actual de la especie en España es el de rareza para los territorios del norte de África y las Islas Canarias. En la España continental y las Islas Baleares no tiene esa consideración. En el pasado sí lo fue. Rareza. Pero el aumento de citas, probablemente debido a una mayor cantidad de observadores y a un mejor conocimiento de la especie, hicieron que abandonase esa clasificación. Hasta el año 2004, cuando dejó de ser considerado rareza en nuestro país, hay ochenta y cinco (85) citas homologadas en España que se corresponden, quizás, con noventa y cuatro (94) ejemplares. La inmensa mayoría de citas españolas proceden, por este orden, de las costas de Galicia y Asturias. Fuente: SEO/BirdLife:



   De esas citas de gavión hiperbóreo, muy pocas son de individuos adultos. De hecho y que sepamos, en Gijón solamente se ha visto un ave de edad adulta. Que fue fotografiada por Xuan Xulio Fernández García. Podéis verlo en esta imagen. A simple vista puede parecer idéntico a las muy comunes gaviotas patiamarillas Larus michahellis de su misma edad. Un adulto. Pero hay, entre otras, una característica definitiva para diferenciarlo. La ausencia de plumas negras en las primarias. En las puntas de las alas. En esta especie las primarias tienen las puntas blancas. Damos las gracias a Xuan Xulio Fernández García por su generosidad.

Gavión hiperbóreo Larus hyperboreus adulto.
Foto: Autor © Xuan Xulio Fernández García.


   Si prestamos atención a las cifras de ejemplares vistos en Gijón en todos estos años de recopilación de avistamientos y que van desde 1993 hasta el 31 de diciembre de 2020, resulta que en veintiocho años solamente se han documentado treinta y siete aves en el concejo de Gijón. Os preguntaréis la razón de dedicarle una entrada en el blog a una especie tan escasa. Aparte del hecho de que por ser, precisamente, un ave tan escasa ya es un motivo para traerla al blog, se da la circunstancia de que hay algunos años en los que los gaviones hiperbóreos nos visitan en números apreciables para ser la escasa especie que es en nuestras tierras. Y nunca sabemos cuando va a sonar la flauta. En concreto hubo dos años en los que se registraron buenos números de aves invernantes. El año 1998, con cuatro aves inmaduras (dos primeros inviernos y dos de segundo invierno). Y el año 2009, con un mínimo de cinco ejemplares: (un adulto, dos segundos inviernos, un primer invierno y un ave de primer/segundo invierno). Tened en cuenta que, a cierta distancia, no es fácil datar la edad de esta especie. Y que en el puerto de El Musel, que es el lugar en donde en la práctica se concentra casi el cien por cien de las citas de la especie en nuestro concejo, ya hace décadas que está restringido el acceso a muchas de sus zonas. Esas zonas restringidas son, precisamente, las que las aves buscan para posarse. Son en las que tienen más tranquilidad y menos molestias. Y allí se juntan la gran mayoría de aves que invernan en el lugar. Para poder verlas es necesario subir a la cercana Campa Torres para, desde de allí y tirando de telescopio, otear los muelles del puerto. La distancia más pequeña desde el punto de observación y hasta el muelle más cercano, ronda el kilómetro. Los meses más propicios para ver la especie son los de enero, febrero, marzo y la primera quincena de abril. El mes en el que estamos y el período en el que, entre los años 2001 y 2019, se han visto siete (7) ejemplares. Fuentes: Annuariu Ornitolóxicu Digital y Annuariu Ornitolóxicu d'Asturies 1998. Coordinadora Ornitolóxica d'Asturies (C.O.A.):





   Volviendo a las edades objeto de esta entrada, aves juveniles y primeros y segundos inviernos, comenzamos por los más jóvenes. Los ejemplares juveniles y los primeros inviernos tempranos. Ambos tienen un aspecto muy similar. Con una coloración general que, como antes dijimos, recuerda vivamente al color del "café manchado". Un beige clarito. Entonces... ¿Cómo podemos distinguirlos? La forma más visual y a su vez muy sencilla es mediante el estudio del plumaje. En los gaviones hiperbóreos en edad juvenil las plumas tienen un dibujo en forma de cuña, de color marrón negruzco sobre el fondo beis claro en el dorso y gran parte de las alas. Es similar al símbolo conocido como chevrón. Más o menos es así:  < . Podéis ver esta característica en estas fotos de digiscoping. A pesar de la diferencia de color, de aspecto, ambas están hechas el mismo día y al mismo ejemplar:


Gavión hiperbóreo Larus hyperboreus juvenil.
Muestra el típico diseño en cuña < en gran parte del plumaje.


   Y en este vídeo grabado con la técnica del videoscoping, podéis daros cuenta de cual pudo ser uno de los motivos que hizo detenerse al ave en su viaje. Soplaba un fortísimo nordeste. Se oye. Y se ve, pues mueve el conjunto del telescopio, trípode, rótula, adaptador y cámara de fotos. Casi seis kilos pesaba el conjunto:

Gavión hiperbóreo Larus hyperboreus juvenil. 26/01/18. 


   Los juveniles de gavión hiperbóreo comparten una característica con los de primer invierno. Tienen el iris oscuro. Por eso no podemos usar este rasgo para distinguirlos. Pero el diseño en cuña de su plumaje sí es algo característico y distintivo en los juveniles. Ese simple rasgo basta para separarlos.


   Vamos ahora con los que consideramos atributos distintivos en los gaviones hiperbóreos de lo que hemos llamado un primer invierno temprano. El color general del plumaje en esta edad es, en un primer golpe de vista, muy similar al del juvenil. Pero su diseño es muy diferente. A esta edad el ave ya ha mudado muchas de sus plumas juveniles. Que, básicamente, son las que tenía cuando dejó el nido. Aunque su color general sigue siendo el del citado ejemplo de "leche manchada", un café bajo de café, no veremos por ningún lado el vistoso y típico dibujo en cuña de los juveniles. Como podéis comprobar en las fotos y el vídeo que os mostramos a continuación:

Gavión hiperbóreo Larus hyperboreus de 1º invierno. 4/01/21.

 
   El iris en esta edad es negro. Como en las aves juveniles. En el recorte de foto, a pesar de no ser de calidad, se puede apreciar:

Gavión hiperbóreo Larus hyperboreus de 1º invierno.
Detalle mostrando el iris oscuro.


Gavión hiperbóreo Larus hyperboreus de 1º invierno. 4/01/21.


   Hasta aquí las cosas parecen relativamente fáciles. Aves de aspecto general muy similar, con un color beis claro, ojos con iris oscuro y un diseño en cuñas oscuras en los juveniles que no tienen las aves que acaban de alcanzar el plumaje de primer invierno. Pero... ¿Qué ocurre cuando nos encontramos un ejemplar de lo que hemos llamado un primer invierno avanzado? ¿Un ave que ya tiene un color general mayormente blanco y que, en teoría, corresponde con un ejemplar de segundo invierno? En este caso ya tendremos que echar mano de diferencias más sutiles. Y que solamente son visibles con el ave cerca de nosotros. Aunque en estos tiempos del siglo XXI y gracias a los avances en fotografía y la salida al mercado de las llamadas cámaras bridge, las cosas no son tan complicadas como antes. Una cámara fotográfica bridge, para los que no sois aficionados a la fotografía, no es otra cosa que una cámara de fotos considerada como compacta avanzada y con un zoom de grandísima potencia. Lo que permite acercamientos muy cercanos al objeto a fotografiar. Aunque el mismo se encuentra a varios cientos de metros. En concreto el gavión hiperbóreo mostrado en las últimas imágenes estaba a unos doscientos metros de nosotros, en un día gris, nublado y con la tarde ya cayendo. Con una luz muy pobre para sacar fotos. Aún así se llega a apreciar el oscuro iris de las aves de primer invierno. Vamos ahora a mostraros imágenes de lo que hemos llamado un primer invierno avanzado. Aves que, a pesar de tener un plumaje casi blanco níveo, tienen el iris oscuro. Lo que es indicativo inequívoco de un ave en su primer invierno de vida.

   En concreto os mostramos el ejemplar que está ahora mismo visitando el concejo de Gijón. Es un gavión hiperbóreo de coloración general blanca. Aunque si se le observa en detalle en el campo tiene algunas leves sombras de color beige, el aspecto general en fotos y en un vistazo somero es el de una gaviota completamente blanca. Fue localizado el pasado jueves 13 de abril. Y todavía fue visto ayer domingo 17 de abril. Unas fotos y un vídeo hechos el día en el que fue encontrado. En la secuencia de fotos se le ve disputando los descartes pesqueros a un grupo de gaviotas patiamarillas Larus michahellis. A pesar de la ventaja numérica de las gregarias gaviotas patiamarillas, cuando el hambre aprieta y hay que comer, el gavión hiperbóreo impone su tamaño y fuerza y consigue ser respetado. En el vídeo se ve al bando volar cuando fue molestado por uno de los marineros que faenaban en la descarga de caballa Scomber scombrus. El motivo principal de la llegada de las gaviotas, entre ellas del gavión hiperbóreo, fue la frenética actividad que hay estos días en el puerto. La descarga de caballa está en su apogeo.

Gavión hiperbóreo Larus hiperboreus de 1º invierno. 13/04/22.








Gavión hiperbóreo Larus hyperboreus de 1º invierno.
Disputa de los descartes pesqueros con varias gaviotas patiamarillas.
13/04/22. 


Gavión hiperbóreo Larus hyperboreus de 1º invierno
y gaviotas patiamarillas. 13/04/22.


   Si os fijáis en detalle en alguna de las fotos, podéis ver que tiene el iris de color oscuro. Al igual que pasaba con el ave que os mostramos antes y que habíamos llamado un primer invierno temprano. Ambos ejemplares tienen el iris oscuro. Lo que es un rasgo definitorio de la edad. Un ave en su primer invierno de vida. También se la denomina un segundo año-calendario. Es decir, un ave nacida el año pasado. Ya no es un juvenil, pues para ello debería ser un ave nacida en este mismo año y, además, no haber hecho la muda post-juvenil de muchas de las plumas que tenía al abandonar el nido. Aquí podéis ver un recorte de una de las fotos anteriores en el que se ve con claridad que el iris es oscuro.

Gavión hiperbóreo Larus hyperboreus de 1º invierno.
Tiene el iris oscuro. Lo que es indicativo de la edad. 


   Y en esta otra secuencia de fotos, tomada en el mismo lugar en el que se localizó al ave el jueves 13 de abril del 2022, se ve al mismo ejemplar huyendo del lugar en el que estaba descansando. Lo echó de allí una gaviota patiamarilla. Fotos del 15 de abril del 2022.






Gavión hiperbóreo Larus hyperboreus de 1º invierno. 15/04/22.
El mismo ejemplar visto el 13/04/22.


   
   En el vídeo se puede comprobar que el gavión hiperbóreo estaba descansando tranquilamente. Las gaviotas patiamarillas Larus michahellis son muy pendencieras.

Gavión hiperbóreo de 1º invierno. 15/04/22.


   Y por último os mostramos unas imágenes de ayer domingo 17 de abril. Parece que le ha cogido el gusto al sitio. Tiene refugio, compañía y comida. Las descargas de los barcos pesqueros proporcionan a las gaviotas oportunidades para alimentarse con los restos que quedan en los muelles.

Gavión hiperbóreo Larus hyperboreus de 1º invierno.
El ave de color blanco, acompañado de varias gaviotas. 17/04/22.

   Y un vídeo del ave en el tejado. Se la ve relajada, descansando. Incluso se estira en un momento dado.

Gavión atlántico Larus hyperboreus de 1º invierno.
17/04/22. Gijón.




   Vamos ahora a complicar más el asunto con los ejemplares de segundo invierno vistos en Gijón. En las guías de identificación de aves que no son específicas de gaviotas, suelen ilustrar a las aves de segundo invierno ya con una muda bastante avanzada y un aspecto diferente al que presenta el ave que os mostraremos a continuación en fotos. Como ejemplo de lo dicho, os compartimos la lámina que viene en la guía de aves que ya hemos citado en el blog. Y de la que muchos pensamos que es la mejor de las que hay en el mercado. La conocida popularmente como "La Collins".

Ilustración de gavión hiperbóreo Larus hyperboreus.
Guía de Aves de Europa. Editorial Collins. Segunda edición inglesa.

   Como veis, el segundo invierno que ilustran tiene un aspecto que no suele corresponder con las aves que vemos aquí en Gijón cuando nos llegan ejemplares de esa edad. Sí indican, fijaos en el texto, el rasgo distintivo del color del iris. Iris pálido (pale iris) es un segundo invierno. Pero no es tan fácil como pueda parecer. En los segundos inviernos que hemos visto hasta la fecha, el color general no es el que muestra esa lámina. Las aves que nos visitaron y que eran de segundo invierno tenían un color general blanco casi puro. Con algunos trazos de color beis (beige) muy claro. Como pudisteis comprobar en el ejemplar que os enseñamos al principio de esta entrada. Aquí lo tenéis de nuevo.



Gavión hiperbóreo Larus hyperboreus de 2º invierno. 27/01/09.
Se ve claramente que tiene el iris claro.

   Fue, antes lo dijimos, el primer gavión hiperbóreo que pudimos fotografiar y filmar. También entró a puerto detrás de los barcos pesqueros. Las imágenes son de digiscoping sin adaptador y con cámara compacta. Tan cerca estaba que no se pudo meter todo el zoom a la cámara de fotos. Y por ello salieron viñeteadas. Otro rasgo típico de su edad y que se ve muy claramente en el recorte de foto que muestra la cabeza, es el color de la punta del pico. Es rosa carne y no negra, como sería en un primer invierno. Y en el vídeo que os compartimos a continuación y que está hecho ese mismo día, podéis apreciar ambos rasgos.


Gavión hiperbóreo Larus hyperboreus de 2º invierno.
27/01/09.


   El 2018, os lo comentamos anteriormente, fue uno de los mejores años para la especie en lo que se refiere a observaciones en el concejo de Gijón. Hasta cuatro ejemplares distintos pudimos ver. Uno de ellos fue este precioso gavión hiperbóreo de segundo invierno. Aunque la foto de digiscoping con adaptador y cámara compacta es de poca calidad, debido a la gran distancia y a un fuerte viento que movía el conjunto empleado, sí se puede apreciar el iris pálido y la punta clara del pico.

Gavión hiperbóreo Larus hyperboreus de 2º invierno.
8/02/18.


  Y en el siguiente vídeo se ve al mismo ejemplar nadando tranquilamente en las aguas de la dársena del puerto. Es un vídeo de cámara bridge en el que se aprecia, claramente, el iris de color claro y el pico con la punta rosada.

Gavión hiperbóreo Larus hyperboreus de 2º invierno.
8/02/18.



   Resumiendo lo dicho hasta aquí en unas simples claves:

EJEMPLARES EN EDAD JUVENIL:
  1. Color general beis muy claro. Como de la llamada "leche manchada" o café con leche muy bajo de café.
  2. Diseño en dorso y alas con marcas en forma de cuña. En chevrón.
  3. Iris oscuro.
  4. Pico color carne con la punta de color negro.

EJEMPLARES DE PRIMER INVIERNO:

   En los primeros inviernos tempranos:
  1. Color general beige muy claro. Similar a la "leche manchada". Y con un aspecto muy parecido a un juvenil.
  2. Ausencia del patrón de diseño con marcas en forma de cuña o chevrón en las plumas de dorso y alas. Ello es debido a que en esta edad ya han hecho parte de la muda post-juvenil y reemplazado bastantes de las plumas con las que abandonan el nido.
  3. Iris oscuro.
  4. Patas y pico color carne. El pico con la punta enteramente de color negro.
   En los primeros inviernos avanzados:
  1. Color general blanco casi puro o completamente blanco. A veces, con trazas muy tenues de color beis claro.
  2. Iris oscuro.
  3. Pico y patas color carne. El pico tiene la punta completamente negra.

   EJEMPLARES DE SEGUNDO INVIERNO
  1. Color blanco prácticamente puro o con leves o muy leves trazas de un color beis muy claro.
  2. Iris de color claro. Lo que es un rasgo diagnóstico.
  3. Patas y pico de color rosa carne. La mancha negra del final del pico, en la gran mayoría de aves de esta edad, ya no llega hasta la punta del mismo. Dicha punta tiene un color rosado.

   EJEMPLARES ADULTOS
  1. Alas y dorso de color gris claro. Similar, aunque de tono aún más claro, al de las gaviotas argénteas europeas.
  2. Patas color rosa carne. Más claras que en las gaviotas argénteas europeas.
  3. Pico amarillo con una mancha roja en el gonys. (El gonys es el área algo más ancha que presentan muchas gaviotas en el extremo de la parte inferior del pico. También se llama ángulo gonial). Es un diseño similar al del resto de gaviotas grandes de Europa.
  4. Alas sin puntas negras en las primarias (las plumas de las puntas de las alas). Este diseño lo comparten solamente con la parecida gaviota groenlandesa y las muy diferentes gaviotas enana y cabecinegra.

   Y hasta aquí hemos llegado por hoy. Esperamos que la entrada os haya sido útil para poder diferenciar, separar por edades, a los ejemplares de la especie que podáis ver. Aprovechad ahora lo que nos queda del mes de abril e id a buscarlos. Y estad atentos en la próxima temporada, ya a últimos de noviembre. Cuando empiecen a llegar los primeros invernantes.

   Por último queremos volver a agradecer la generosa colaboración de Xuan Xulio Fernández García por permitirnos publicar la foto del adulto que ilustra parte de esta entrada. Muchas gracias a él. Y también a vosotros, por visitarnos.

6 comentarios:

Manuel Marcos dijo...

Fantástica entrada. Muy bien explicado, fácil de asimilar. Muchas gracias Ignacio.

Juan carlos dijo...

Fantastico Nacho muy buen trabajo

Nacho Vega dijo...

Gracias, Manolo y Juan Carlos.

Cuando publicamos algo en el blog, nuestra pretensión es, siempre, ser amenos y didácticos. Por ese orden. Si no eres ameno, si no cuentas bien algo, vas a aburrir a las piedras. Y si no eres didáctico, si no enseñas algo a quien va a leer el blog, de poco vale ser ameno. Tampoco pretendemos conseguir la cuadratura del círculo. No damos más que una serie de claves concisas, claras, concretas, para poder distinguir las diferentes edades de la especie. Muchas gracias por vuestra lectura y comentarios. Estas cosas nos dan energías para continuar.

luismadrid dijo...

Buen reportaje Nacho. Las jóvenes e inmaduras no se me van a pasar. Alguna adulta puede. Muchas gracias por el aporte.

De paseo por la naturaleza dijo...

Preciosa y didáctica entrada. Enhorabuena. Que ganas tengo de ver uno. Un saludo.

Nacho Vega dijo...

Muchas gracias, "De paseo por la naturaleza". Pues... Aprovecha y vete a El Musel. Te queda un poco lejos. Pero si vienes, es prácticamente seguro que lo verás. Está casi siempre, por no decir siempre, en el muelle pesquero. Una de las dos únicas zonas de libre acceso al puerto. Y se le ve muy bien. Es enorme y blanquísimo.