Birdwatching in Gijón (N Spain)

domingo, 22 de noviembre de 2020

Bisbitas. Un género complicado.

    La observación e identificación de aves es una actividad que, para quienes nos gusta la vida salvaje, proporciona muchas satisfacciones. Salir al campo a bichear, observar la fauna salvaje, fotografiar a los animales que se mantienen al descubierto el tiempo suficiente para poder tomar unas imágenes decentes. Identificar lo que estamos viendo y/o fotografiando... Muy gratificante poder desarrollar nuestra afición. Pero algunas veces las cosas se complican. Algunas aves son difíciles de observar. Las causas de esa dificultad son varias. Su carácter inquieto, el lugar por donde andan... Y además de esto, hay algún género de aves que, por ser muy parecidos todos sus miembros, presentan dificultades extras a la hora de identificar correctamente a las distintas especies que lo componen. Esto último que os contamos pasa con los (o las) bisbitas "Anthus sp." Las bisbitas son unos pájaros de pequeño tamaño, que tienen entre 14 y 18 cms. de longitud y unos 24-27 cms. de envergadura, por lo general. El bisbita de Richard Anthus richardi es algo mayor, con una longitud de unos 19-20 cms. y unos 29-33 cms. de envergadura. En Asturias podemos ver, principalmente, las siguientes especies: Bisbita campestre Anthus campestris, bisbita costero Anthus petrosus, bisbita alpino Anthus spinoletta, bisbita pratense Anthus pratensis y bisbita arbóreo Anthus trivialis. Casi todos los inviernos (en muy pequeño número) podemos observar en algunos puntos del litoral a los bisbitas de Richard Anthus richardi. Un migrador que viene desde sitios tan alejados como Mongolia o Siberia. Especies aún más escasas (alguna cita se ha dado en Asturias) son ya muy raras y complicadísimas de ver. En esta entrada del blog vamos a centrarnos en tres especies que se pueden ver, con mayor o menor facilidad, en el concejo de Gijón. Esas especies son el bisbita costero, el bisbita pratense y el bisbita arbóreo. También se observan, en muy escaso número durante los pasos migratorios, los bisbitas de Richard y campestres. La bisbita campestre anida principalmente en zonas de media y alta montaña, con algunas puntuales citas de cría en las zonas costeras. El bisbita de Richard es invernante regular, pero escaso, en algunos puntos de la costa. En donde también se le ve en paso. Nosotros tenemos un dato de un migrante postnupcial visto, hace algunos años, en el Parque del Cabo San Lorenzo. Datos extraídos del Anuario Ornitológico Asturiano. Y publicados por la Coordinadora Ornitolóxica d'Asturies en su revista "El Draque". Volviendo a las tres especies de bisbitas que pueden verse con relativa facilidad en Gijón hay que decir que, aunque algunas especies son muy parecidas en su aspecto, una forma de poder diferenciarlas es por la época del año en la que las vemos. La bisbita arbórea Anthus trivialis es una especie que llega en primavera a nuestras latitudes para criar. Y se marcha a principios de otoño al continente africano para pasar el invierno. Aunque es un nidificante abundante por toda Asturias, en Gijón solamente la hemos observado en los pasos. Y en pequeños números. No más de dos o tres ejemplares. Actualmente parece que la especie está en disminución en nuestra región. Se distingue de su pariente, el bisbita pratense, principalmente por tener las franjas de pecho y flancos de diferente tamaño. Las de los flancos son más finas que las del pecho. Lo que, visto a distancia, da un efecto como de que solamente tiene marcas en el pecho. Carece, también, de tinte ocráceo oliva en los flancos. Y el color de pecho y vientre (quitando las marcas oscuras) es más claro que en el bisbita pratense. Que sí tiene un tinte ocre en sus flancos. Esta pareja de bisbitas arbóreos fue vista en el entorno del Parque del Cabo San Lorenzo. Las fotos son recortes de las originales.


Bisbita arbóreo Anthus trivialis 


   El bisbita más común en Asturias (y por ende en Gijón) es el bisbita pratense Anthus pratensis. Antiguamente llamado bisbita común. Anida en el norte y este de Europa y Asia, desde el sureste de Groenlandia,  Islandia y hasta el noreste de Asia. Y pasa el invierno en el sur de Europa, norte del continente africano y zonas del Próximo Oriente. En Asturias se conoce algún caso puntual de reproducción. Pero es algo casi anecdótico, pues es principalmente invernante. Cuando llega en migración lo hace en grandes cantidades, formando bandos de hasta varios cientos de ejemplares. El año pasado pudimos ver un bando de unas setenta aves en la Campa Torres. Y hace años, en un conteo de pocas horas desde el mirador del cabo San Lorenzo, vimos llegar desde la mar unos doscientos. El bisbita pratense, aparte de aparecer en una época del año diferente de la que lo hace el bisbita arbóreo, se distingue de su "primo" por tener un pico más delgado y fino, una más corta y menos definida lista superciliar, flancos con un tinte ocre oliváceo, la uña del dedo posterior más larga y marcas de similar tamaño en pecho y flancos.


Bisbita pratense Anthus pratensis 






   Por último os mostramos unas imágenes de la tercera especie de bisbita que podemos ver, con relativa facilidad, en el concejo de Gijón. El bisbita costero Anthus petrosus. Antiguamente era una subespecie del bisbita ribereño Anthus spinoletta, llamada bisbita ribereño costero A. s. petrosus. Actualmente se ha separado en dos especies. Bisbita alpino Anthus spinoletta y bisbita costero Anthus petrosus. Es una especie a la que pocos observadores prestamos la debida atención. Su pequeño tamaño, escasez y comportamiento esquivo, hacen que no sea una especie atractiva para el observador. Se distingue bastante bien de las dos bisbitas anteriores. El color  general pardo gris ceniza de cabeza, dorso y alas, el patente anillo ocular blanco, las marcas oscuras de pecho y flancos, que tienen un leve tinte grisáceo,  las patas y pico oscuros, son rasgos que los diferencian de casi todos los demás bisbitas. En Gijón es de presencia escasa, pero bastante regular, en las escolleras de las playas de Poniente y El Arbeyal. Aunque también se observan aves solitarias en el embalse de San Andrés de los Tacones. Datos del Anuario Ornitológico de Asturias publicados por la Coordinadora Ornitolóxica d'Asturies en su revista "El Draque". Hablando por nosotros, las únicas observaciones que tenemos de la especie están hechas en la escollera que, en la playa de Poniente, va desde el Acuario y hasta la baliza que culmina el espigón oeste de la playa. Y en la escollera que va desde el principio de la playa de El Arbeyal y hasta Marina Yates. Siempre individuos aislados. Y siempre un visto y no visto. Suelen estar metidos entre las piedras, en constante búsqueda de insectos. Las imágenes que os compartimos están hechas por María del Carmen Del Llano Fernández y Alfonso Jorge Caso De Los Cobos Martínez. A quienes damos las gracias por el detalle de habernos dejado compartirlas. Muchas gracias a ambos.

Bisbita costero Anthus petrosus.
Foto: Autores © María del Carmen Del Llano Fernández
y Alfonso Jorge Caso De Los Cobos Martínez.

Bisbita costero Anthus petrosus.
Foto: Autores © María del Carmen Del Llano Fernández
y Alfonso Jorge Caso De Los Cobos Martínez.


   Esto ha sido todo por hoy. Hasta una próxima ocasión.

2 comentarios:

Javi Alonso dijo...

aún explicándolas tan bien... me resultan dificilísimas...

Nacho Vega dijo...

Buenas, Javi.

Es que son muy difíciles. Además, quitando la abundantísima bisbita pratense, no suelen verse en cantidad. Y a ello hay que sumar que son bichos pequeños, de colores apagados, comportamiento inquieto... No son fáciles, la verdad. Pero eso es lo bonito del asunto. Que no son fáciles. Cuando llegas a la identificación de un bicho, es una sensación de lo más gratificante.

Muchas gracias por entrar a leer y comentar. Abrazos.